La década de 1980 fue, sin lugar a dudas, una de las más complejas para la industria automotriz nacional. Partirá con una apertura comercial, reconocible por el ingreso masivo de modelos de origen japonés y, en menor medida, provenientes desde Europa del Este.
Luego vendrá el colapso de FIAT, una de las marcas más vendidas, en medio de una severa crisis económica, a lo que se sumará un terremoto en la zona central, lo que derrumbará las ventas hasta un mínimo de sólo 17.267 unidades anuales durante 1985, cifra muy distante de las 140.730 de 1981, lo que implicará una lenta renovación del parque automotor.
Es en este escenario que ingresa LADA, transformándose en un importante elemento motivador para que muchas familias chilenas decidieran cambiar su modelo usado o adquirir su primer vehículo 0km.
Destacar que en aquellos años, en el mercado de vehículos usados, se ofrecerán fundamentalmente unidades 1977-1983, mientras que en 0km el fuerte estaba en unidades Pickup, algo atípico a nivel mundial pero común en Chile por el beneficio tributario(rebaja de IVA) de las camionetas.
El Samara ingresará a Chile en enero de 1988, sólo en carrocería 3 puertas 1.3L. En diciembre del mismo año se suma la versión 5 puertas, cerrando el año con un total de “525“ unidades vendidas (407 3P y 118 5P).
En 1990 ingresa el motor 1.5L para la 5 puertas y en 1992 para la 3 puertas, mismo año en que se suman las versiones catalizadas 1.3 y 1.5L.
En específico, del Samara, en Chile, entre los años 1988 y 1997, se comercializarán un total de 22.190 unidades, en versiones carrocería hatchback 3 y 5 puertas, más una sedán.
Asociado a motorizaciones 1.3 y 1.5L, con y sin catalizador, y con versiones especiales como las Feeling y Charlotte, se transformará en el segundo modelo más vendido de la marca luego de la serie 21.
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